By Marta
Siempre he oído que Madrid es el mejor puerto de España, pero nunca lo había terminado de entender hasta hace unos días que hemos descubierto que Madrid tiene junto al Hotel Ritz un «museo naval» que nada tiene que envidiar a otros que puedan haber en ciudades típicamente navieras como Ferrol (guiño a mi marido), Cádiz o Cartagena, así que esto tiene que ser, porque en Madrid ¿también hay mar?. 🙂
Un poquito de historia…..Se inauguró en 1843 y está gestionado por el Ministerio de Defensa que nos enseña desde como se vivía a bordo de un galeón, se defendían los marinos de los piratas o los diferentes tesoros que se han ido encontrando en el mayor museo del mundo sobre esta materia, el fondo del mar.
Es el típico sitio que encantará tanto a los amantes de la historia como a los más pequeños que podrán disfrutar de las aventuras que se van a montar con cada una de las reproducciones de los barcos que hay o imaginarse con los diferentes uniformes que representan cada una de las épocas de nuestra historia marítima.
Aunque cuando llegamos, nuestra primera impresión fue un poco negativa ya que no es un edificio de líneas clásicas que impresione como puede ser el museo del Prado o el Thyssen; es un edificio simple, del que puedes pasar por su lado sin parar porque no te llama en absoluto la atención ni te da ninguna pista del tesoro que guarda entre sus paredes; es un edificio «pequeño» del que no piensas que pueda tener gran cosa, pero tengo que reconocer, una vez más, que fue una impresión totalmente equivocada porque cuando pasas el control (previa solicitud del DNI de los más mayores) y subes las escaleras, descubres un museo extenso que abarca hasta 24 salas ordenadas cronológicamente desde los Reyes Católicos hasta nuestros días.
Os diré que La amplitud del museo y la cantidad de objetos que hay para ver pueden hacer un poco pesada la visita a los mas pequeños pero hay ciertas salas que, yo creo, les pueden interesar más y de las que merece hacer alguna mención.
De las primeras salas, destacaría desde el gran lienzo que conmemora el IV centenario del descubrimiento de America, con Colón llegando al nuevo mundo donde se le ve recibido por los indígenas y que por su tamaño y colores, capta la atención inmediata de los enanos, hasta un mosquete de considerable tamaño que les hará pensar intentando entender que para poder dispararlo se necesitaba la ayuda de varias personas a la vez y apoyarse en el suelo.
Pero lo que más les gustara será la reproducción del Galeón «Nuestra Señora de la Concepción de las animas» en el que podrán apreciar la dimensión que podían llegar a tener estas naos, la cantidad de cañones con los que contaban hasta los camarotes, puentes e innumerables detalles técnicos de los que gozaban, pero además, si vuestros hijos son como los míos (preguntones, y con una imaginación por las nubes), os recomiendo que os llevéis preparada alguna «batallita» adicional; os dejo las mías por si os sirven de ayuda……. 😉
- En uno de estos barcos se descubrió América,
- Eran como una mini ciudad porque eran muchos los que viajaban en él, entre el capitán, los altos mandos y los marineros y pasaban muchos meses en la mar.
- Que no era tan divertido viajar en esa época ya que mientras el capitán vivía en los puentes de arriba, con mucha decoración y lujo, el resto, vivían todos juntos y mal alimentados, de ahí, que hubieran muchas enfermedades y muchos de ellos no llegaran a su destino.
- En estos galeones, todo el mundo trabajaba, había carpinteros, panaderos, cocineros, medico y un cura, incluso niños que hacían funciones de pajes y a los que se les asignaban las tareas más sencillas.
- Para divertirse en el barco, cuando tenían un poco de tiempo libre, jugaban a las cartas o se contaban historias de piratas.
Llegamos al pabellón central, donde llama la atención su gran vidriera en el techo que dota de gran luminosidad y color a la sala, llena de un montón de maquetas de barcos que los ingenieros daban como guía a los carpinteros para que supieran como construirlos o que incluso los futuros capitanes usaban para estudiar las diferentes partes de un barco, sala, que termina con un video explicativo de cómo se extrajeron los objetos de una nave española hundida en 1600 y que a los más pequeños les sorprenderá de como el mar lo ha guardado durante siglos y que, ahora, nos dan una pista de como se vivía a bordo de una embarcación en aquellos años , pero sobre todo, se sorprenderán aún más, cuando puedan comprobar que todo lo que han visto en el video, lo pueden ver físicamente en la sala de al lado.
A partir de aquí, veremos diferentes salas con colecciones de armas, escudos o maquetas de embarcaciones de diferentes partes del mundo, uniformes de marines españoles, la reproducción de la fragata Numancia, que creo ha sido el primer buque acorazado español, con alguna de sus planchas acorazadas perforadas por algún proyectil (esto le encanto a Jorge jejejeje ), mascarones de proa de navíos del sigo XIX y XX , vitrinas con colecciones de soldados de plomo que enseñan la evolución de los uniformes de la armada española o incluso una curiosa hamaca que fue utilizada por Alfonso XII (cuando era príncipe de Asturias) en un viaje con su madre a las Islas Baleares.
No deis por acabada la visita sin antes visitar la reproducción de un camarote de comandante y una camarote de oficiales del siglo XIX decorados con objetos y muebles de la época y que intentan demostrar la sensación de comodidad propia de una vivienda.
Os recomiendo de verdad esta visita, a los niños/as les encanta ya que están en la época de piratas y soldados, es gratuita aunque te piden un donativo voluntario a la entrada de 3€ para la conservación del Museo, y este año no cierran en Agosto!
Tienen visitas guiadas los sábados y domingos a las 11.30, Manu ha hecho parte de ella y me ha dicho que tenemos que volver nosotros solos (son muy intensas para los niños) porque el guía disfruta y te explica todo de manera muy amena e interesante.
También cuentan con actividades y talleres infantiles los fines de semana, pero sólo a partir de los 8 años, por lo que me han contado consisten en una visita del museo con el Capitán Telmo y con el que harán un viaje en el tiempo e irán conociendo a diferentes personajes históricos que les explicarán cada una de las salas, pero como sabéis mis hijos aun no tienen esa edad por lo que no os puedo decir que tal están…. 😦
Si os animáis y queréis saber más sobre el museo