By María.
Ayer por la tarde, mis peques estaban un poco revolucionados, supongo que el calor que está haciendo estos días en Madrid les afecta…. je, je…. dónde podemos ir?…. aprovechando que en estos días comienza la lluvia de estrellas «Las Perseidas», se nos ocurrió irnos a las afueras de Madrid para contemplar una noche estrellada. Pero hasta que llegase la oscura noche teníamos que hacer tiempo. Nos decidimos por irnos a cenar a la Granja de San Ildelfonso, municipio de la provincia de Segovia a unos 76 Km de Madrid, pasando por el puerto de Navacerrada (donde al regreso haríamos una mágica parada para contemplar las estrellas fugaces).
La Granja, destaca por su Palacio Real, sus jardines con sus fuentes, así como la Real Fabrica de Cristales, y su Parador Nacional. Además destacan las numerosas rutas de senderismo por la sierra del Guadarrama que se pueden realizar partiendo de esta localidad (eso, será para otra ocasión…. ).
El Palacio fue construido en el año 1721 por Felipe V como residencia para descanso. En el 1724 el rey se retiró a este lugar y durante los 20 años siguientes engrandeció los jardines y el palacio que fue utilizado como residencia de verano por todos sus sucesores hasta Alfonso XII.
El Palacio es un bello ejemplo de arquitectura palatina europea, con jardines y fuentes de estilo versallesco.
Algunos acontecimientos históricos que sucedieron en La Granja fueron la boda entre Carlos IV y María Luisa de Parma, las firmas de los tratados de San Ildelfonso de 1777,1796 y 1800, la sublevación de los sargentos de la guarnición del Palacio en 1836 que obligó a la regente María Cristina de Borbón a restablecer la Constitución de 1812, …. y algunos más.
Después de esta breve clase de historia, decir que dimos un paseo por las calles y jardines de esta preciosa localidad.
Hasta que llegó la hora de cenar,……
No hace falta que os diga lo bien que se come en Segovia, no???… Destacan platos como el «cochifrito», el ponche segoviano…. en fin…. no vamos a ponernos ahora a salivar, pero aunque sea por su gastronomía bien vale la pena.
Después de cenar, nos dirigimos a los Jardines del Palacio, que son uno de los mejores ejemplos que hoy se conservan de los jardines del siglo XVIII. Ocupan 146 hectáreas, de las que 67 son auténticos bosques. Dentro del conjunto destacan preciosas fuentes y esculturas.
Los jardines se pueden visitar todo el año en horario diurno abriendo a las 10:00 y cerrando antes de la puesta de Sol (18:00h en invierno y 21:00h en verano) y siendo la entrada gratuita excepto los días en que ponen en funcionamiento las reales fuentes (4,00€). Ahora en verano, a parte del horario habitual, abre de 22:00 a 24:00, cobrando 2,00€ de entrada (niños hasta 5 años no pagan) para realizar una visita nocturna en la cual se puede ver alguna fuente en funcionamiento.
Mis peques se lo pasaron en grande, ellos llevaban linternas para investigar los sitios más «oscuros»…. je, je…. La verdad, ya habíamos visitado anteriormente estos jardines pero de día, de noche cambian totalmente convirtiéndose en un lugar mágico y esplendoroso, a medida que paseábamos yo me imaginaba encuentros furtivos en épocas antiguas, reuniones secretas en algún oscuro rincón….. Sí, vale… soy muy fantasiosa….
La fuente que esta noche estaba en funcionamiento, era la Fuente de Diana….. impresionante!
Durante el paseo encontramos otras fuentes que aunque no estaban en funcionamiento, iluminadas eran igual de preciosas.
Abandonamos La Granja para ir regresando a Madrid, pero al llegar a lo alto del Puerto de Navacerrada, aparcamos el coche en unos de los aparcamientos cercanos a la estación de esquí. Queríamos enseñarle a Gabriela (Alejandro se había quedado frito en el coche al poco rato de salir de La Granja) las Perseidas. Vaya sorpresa!!!… había un montón de coches, no fuimos los únicos en buscar un cielo limpio para ver las estrellas. Gente que había subido con colchonetas, hamacas, sacos de dormir…. madre mía! Eran las 00:30h y había ambiente de fiesta en la montaña!!…. Cada vez que se veía una estrella fugaz la gente gritaba…. Ja, ja… Al principio Gabriela estaba un poco cabreada porque a ella se le escapan, …. pero al final pudo ver algunas de ellas y pedir un secreto deseo…. Yo también pedí el mío, pero no os lo voy a revelar. Hasta la próxima entrada amig@s!!