Post by María.
Este sábado ha sido de los más divertidos que recuerdo, de aquellos que también te dejan fotografías en tu corazón, por la belleza y disposición de los elementos que te rodean, de la luz, que a veces piensas como pinceladas de claro y oscuro. Ha sido de aquellas visitas que quedarán en la memoria de mis hijos, y de sus padres!!, que por cierto, esta actividad la encontró Nacho.
Dónde estuvimos? En el emblemático Castillo de la Muela, con sus molinos de viento a ambos lados, en lo alto del Cerro del Calderico en Consuegra (Toledo), a hora y media de Madrid.
Historia:
Los orígenes de esta villa manchega, se pierde en los tiempos. Se sabe, por los escritos de Plinio, que hubo en el lugar una importante población carpetana de nombre Consaburum.
Durante la dominación árabe Consuegra se convirtió en residencia de algunos moros, y en las cercanías de la localidad manchega, el Cid derrotó a Alffgio, valí de Dénia, en el 1082.
El Castillo de la Muela, es de esos castillos que a lo largo de los años ha pasado de mano en mano, y ha sufrido asedios constantemente.
Es del s. X, fortaleza que contaba con tres recintos amurallados!. Por ahí pasaron celtíberos, romanos, visigodos, cristianos, moros…. Y debido a ello ha sufrido importante deterioro.
Deciros que en 1097 tuvo lugar la Batalla de Consuegra donde, Don Diego, el hijo del Cid Campeador, muere defendiendo el territorio frente a tropas almorávides. Pero, perdió la vida en batalla, o fue traicionado por los “suyos”???…. esa pregunta siempre a la siempre la respuesta en el aire quedará.
Los ejércitos comandados por el rey Alfonso VI, fueron allí vencidos por los almorávides.
En 1183 Alfonso VIII donó el castillo a los caballeros de la Orden de San Juan Hospitalario de Jerusalén, donde establecieron un priorato dirigido por Juan de Austria.
En 1809, fue tomado por tropas francesas.
Con la “desamortización” de 1836 pasó a manos de particulares y en 1962 es adquirido por el Ayuntamiento de Consuegra, comenzando su rehabilitación en 1985, trabajos que aún duran.
Yo entiendo que explicar historia a los niños, y más cuando son pequeños, puede que no sea de lo más divertido, pero en nuestro caso fue supersencillo ya que la visita fue teatralizada, a cargo de la compañía Vitela Teatro, compañía nacida en Consuegra.
Ya se que empiezo por el final, sí, desde aquí os doy las gracias, gracias a cada uno de los actores que allí nos amenizaron con majestuosas actuaciones, gracias por hacernos disfrutar como niños, por todas las sonrisas que nos habéis sacado a cada uno de los que allí estuvimos, por todas las caras de asombro, nervios, risas, incluso sustos….
Ya son algunas las visitas teatralizadas que mi familia y yo hemos hecho, pero desde luego, esta ha sido la más original, la mejor que hemos realizado.
Pues bien, comienzo mi relato. Habiendo reservado previamente la visita, llegamos al Castillo a mediodía, para recoger las entradas. A las 13h, comenzaba la visita guiada y teatralizada.
Punto de encuentro: la entrada al Castillo, allí debíamos esperar a un soldado “muy loco” que a parte de recoger entradas, nos daría la bienvenida a su manera en castellano antiguo…. Tan antiguo que Gabriela y Alejandro pedían traducción, y todos los allí presentes!….
Entre chascarrillos, bromas con los visitantes y “discusiones” con algún habitante más del castillo… comenzaron a relatarnos como fue construido el Castillo de Consuegra, y por todas las “manos” por las que había pasado.
Y entre historias y leyendas de un juglar, sonaron los cuernos avisando de las túnicas negras, que llegan los moros!….. todos dispuestos a entrar en el Castillo para protegernos, y de paso nos dieran unas nociones de lucha con espada de madera para defendernos, para después en parejas practicar…. Alejandro, contra su padre, y lo hizo tan bien que el instructor le dijo que lo harían escudero, y que orgulloso estaba de ello mi niño.
Una vez instruidos, parece que los moros no se atrevieron con nosotros, así que proseguimos visita al interior del castillo para que nuestro peculiares y divertidos personajes nos explicasen un poco más de historia y vida en el castillo.
Del interior no disponemos de fotos para no entorpecer el trabajo de los actores y no hacer saltar flashes durante su trabajo, que bastante incómodos deben ser.
Tampoco quiero desvelar todo lo que aconteció, porque os dejaría sin factor sorpresa. Solo decir que mi familia y yo nos reímos un montón!
La visita dura como hora y media, pero se pasa muy rápido…. Y te deja con ganas de más.
Actores sublimes en su papel, que por cierto, nada fácil me pareció por sus largos diálogos y expresiones antiguas. En nuestra memoria auditiva quedan sus tremendos timbres de voz, claras y que retumbaban por todos los habitáculos.
Finalizada la visita, el tiempo justo para disfrutar de las vista de la torre más alta del castillo, viendo las grandes llanuras a mi mente vino aquella frase de “ancha es Castilla”!. Camino a la salida pudimos ver el calabozo y jardín. También pudimos charlas con los actores (ya vestidos de calle), que estaban esperando que saliesen todos los visitantes para el cierre de las puertas del castillo.
Cuando recogimos las entradas, nos habían comentado que con ellas podríamos visitar uno de los doce molinos que estaban a los lados del castillo, el “molino Rucio”, ya que cada molino tiene un nombre.
Así que decimos ir a comer al pueblo y después volver a subir al cerro.
Que hambre teníamos y que rico se come en el pueblo… mientras comíamos vi un letrero anunciando la “fiesta del azafrán”, así que pregunté a la camarera y nos dijo que se celebraba el último fin de semana de octubre, y que es un fiesta muy bonita a la que vale la pena venir…..
Este año se celebrará la 55ª edición de esta fiesta tradicional, declarada de Interés Turístico. En la fiesta de la Rosa del Azafrán, además de la monda del azafrán tienen lugar otras actividades como el teatro, exposiciones, torneos, certamen gastronómico, muestras de artesanía… Esos dias, el Molino Sancho abre sus puertas para la “molienda de paz” donde reparte harina entre sus visitantes. También se celebra el “Concurso Nacional de Monda”. Qué más?, porque hay más cosas!…. se elige a la “Dulcinea” del pueblo acompañada por damas de honor. Y el domingo celebran el “Festival Folclórico de Coros y Danzas” en el que participan grupos de toda la región.
Pues ahí os lo dejo por si os apetece acercaros a Consuegra durante la fiesta de la Rosa del Azafrán, no digáis que no os avisamos!.
Y siiiii….. después de comer volvimos al Cerro Calderico para visitar el Molino Rucio!…. uno de sus famosos molinos de viento, 12 en total, alineados todos sobre el cerro. Estos molinos fueron los que inspiraron a Cervantes el famoso episodio de la lucha con los gigantes de su más popular personaje “Don Quijote de la Mancha”.
Podemos entrar con la misma entrada del castillo, pero de forma libre. Nosotros decidimos pagar 2€ por adulto (niños gratis) para recibir explicaciones del molinero.
No tuvimos mucha suerte con respecto al viento, más bien escaso, pero lo justo para que el molinero lo pusiese en marcha unos segundos y ver como funcionaban todos sus engranajes y se hacia la molienda.
El molino se considera la primera fábrica de la historia, ya que tiene los mismos elementos: un edificio, una fuente de energía, la maquinaria y los operadores, teniendo como resultado la salida de un producto, en nuestro caso: harina (por cierto, la harina que fabrica este molino en concreto, va para uso animal, ya que debido a las impurezas no es para consumo personal)
El uso original del molino de viento era el molido de cereales, especialmente el del trigo (los peques vieron allí los sacos de trigo y maíz). Con el tiempo se diversificaron las maneras de aprovechar el viento por medio del mismo mecanismo y se denominó molino de viento a todo aparato movido por la fuerza del viento, sin importar su tarea.
En general, el molino de viento funciona cuando el viento mueve las aspas (viento escaso que había en el momento de nuestra visita), haciendo girar un eje central que está conectado a una piedra para moler. La mejor piedra para moler es el pedernal, ya que no causa impurezas en la harina resultante (no era el caso de este molino, ya os comenté que la harina resultante va para consumo animal debido a las “cáscaras” que contiene).
Por cierto, yo no tenia ni idea, podemos cambiar la orientación de las aspas (según el viento) mediante una palanca enorme que está fuera del molino.
Otra curiosidad, es que el techo del molino es desmontable, porque por algún sitio debemos sacar la gran piedra utilizada para moler o la gigantesca rueda que hace que todo funcione, y desde luego, por la puertita y estrechas escaleras, no caben!.
Salimos de esta visita con más información para nuestro saber. Cuántas cosas hemos aprendido en esta excursión!!.
Nacho nos dijo que él sabia que en este pueblo se encontraba una presa romana, y como teníamos tiempo, salimos en su busca.
Por el pueblo hay indicadores, pero una vez salimos…. Ya no…. Solo un gran cartel con publicidad de la presa, sobre un camino de tierra de color clara, a unos 4 Km de Consuegra. En ningún momento indicaba que fuese por ese camino de tractores, … pero en vista que al pasarlo ya no encontramos desvío alguno indicando por donde se iba, decidimos tomarlo.
Tiene su encanto, porque vas por tierras de cultivo, sobretodo vid. Nos perdimos un poco porque nos habíamos imaginado la presa de otra manera, pero aprovechamos para pasear entre uvas y campos donde ya habían recogido los cereales plantados, mis peques también averiguaron como son la almendras cuando aún cuelgan del árbol….
Solo decir que cuando ese camino se desvía en dos, coger el camino de la derecha (el que va hacia el Santuario de Urda) y observar bien a vuestra derecha… lo que yo pensaba que era un muro de piedra separando campos o cultivos, resultó ser lo que queda de la presa romana.
Y es que en nuestra cabeza estaba la imagen que aparece en la web y fotografía del cartel que allí encontramos, pero justo ese primer tramo, no se parecía mucho…..
Esta presa fue construida por los romanos entre el s. I y II d.C., con el fin de abastecer a la población, la más larga y más antigua de la historia. Actualmente, como os he dicho está situada entre cultivos de cereales y viñedo.
Está declarada de Bien de Interés Cultural, conserva el frontal y paramentos y contrafuertes. Hoy en día no tiene funcionalidad.
Solo puedo decir que objetivo conseguido, vimos la presa.
Ya nos íbamos para casa, pero Alejandro observó que acababan de encender las luces del castillo y de los molinos, y nos pareció una buena idea volver a subir al cerro Calderico y verlo de cerca.
Gran idea, preciosas las fotografías que pudimos tomar con la cámara y con nuestra memoria, porque son de las que te quedan para toda la vida.
Ahora, que se que estáis deseando hacer esta excursión, podéis consultar horarios y precios en www.turismocastillalamancha.es/patrimonio/castillo-de-consuegra-42364/descripcion/
Para las visitas teatralizadas: Sábados, Domingos y Festivos a la 13:00h, venta de entradas en taquilla o si preferís reservar (para no quedaros fuera, que sería una pena), podéis hacerlo llamando al teléfono 621 201 718 o e-mail reservas@vitelateatro.com
Avisaros de que normalmente las visitas teatralizadas al Castillo quedan aplazadas en invierno, desde el 15 de noviembre hasta febrero más o menos.
Espero que os haya gustado este post (mi familia y yo de verdad que disfrutamos esta visita) si es así, por favor, compartid!!!…. muchas gracias una semana más.
No lo has podido describir mejor.
Yo tb soy de esas madres q siempre viaja con sus hijos y me interesa tu blog.
Un saludo.
Ana (una Consaburense 😉)
Muchas gracias Ana!…. los comentarios como el tuyo son lo que nos anima a seguir!